Frescura, color, contenido de aceite, contenido de grasa, textura, valor nutricional o retención de agua, entre otros, componen la lista de parámetros de calidad del pescado y el marisco. Sin embargo, dada la naturaleza delicada y vulnerable del pescado y el marisco, existen múltiples riesgos potenciales para la calidad. El engaño para obtener ganancias financieras supone una amenaza aún mayor en este sentido. Al mismo tiempo, existe un creciente interés de los consumidores por cuestiones sobre calidad y seguridad alimentaria.
Los métodos analíticos tradicionales para evaluar la calidad del pescado y el marisco incluyen varios métodos fisicoquímicos, de textura, sensoriales y eléctricos. A pesar de la importancia de estos métodos estándar, su implementación es cara, requiere tiempo y es susceptible de variación. Por lo tanto, las soluciones analíticas basadas en infrarrojo cercano (NIR) han adquirido gran popularidad debido a la velocidad del análisis, la preparación mínima de la muestra y su alta repetibilidad. Múltiples parámetros, como la humedad, la grasa, el aceite, la sal o el pH, entre otros, pueden entregarse en medio minuto, lo que convierte a NIR en una solución versátil para diferentes áreas de aplicación, desde laboratorios que buscan un tiempo de respuesta rápido a análisis directamente en el entorno de procesamiento.
Las ventajas del análisis de calidad del pescado y el marisco incluyen una selección óptima de la materia prima, una correspondencia exacta de las especificaciones del contenido de grasa, la eficiencia de la producción y, en última instancia, la protección de la marca mediante la conformidad con las especificaciones del producto final y las declaraciones legales.