Con la tecnología de rayos X, se pueden clasificar de manera objetiva cortes enteros como la panceta de cerdo, los jamones serranos, etc., en categorías uniformes, algo que no es posible con la inspección visual tradicional. La clasificación se basa en la medición de la grasa y se puede combinar con el reconocimiento por imágenes.
Las ventajas de esta tecnología se aplican a los productores de panceta, productos de jamón seco y otros fabricantes de productos cárnicos acabados a partir de cortes de carne enteros.
Los proveedores de cortes de carne cruda también pueden garantizar que las entregas cumplen las especificaciones (contenido en grasa, tamaño, longitud, anchura, espesor) y no contienen objetos extraños.